Como vapear me ha afectado en mi salud

"Hace unos meses, después de varias semanas de sentir presión en el pecho y falta de aire, decidí ir al médico. Me sorprendió cuando me preguntó de inmediato si vapeaba. Le dije que sí, desde hacía años, casi diario. Me explicó que cada vez llegaban más jóvenes con síntomas parecidos, y que la evidencia nueva mostraba daños en el corazón, irritación pulmonar e incluso presencia de metales pesados en algunos vapores. Me habló, por ejemplo, del níquel y el plomo que están encontrando en varios modelos. Yo no tenía idea de que algo así pudiera entrar directo a mis pulmones.

También me mencionó que mi frecuencia cardiaca estaba constantemente elevada, algo que yo atribuía al estrés. Me dijo que una sola inhalación de vapeador podía alterar el ritmo cardiaco y que usarlo todo el día mantenía el cuerpo bajo una especie de 'alerta' permanente. Empecé a atar cabos: los dolores de cabeza, la ansiedad cuando intentaba dejarlo, los lapsos de falta de aire.

Lo más difícil fue aceptar que estaba enganchado. Pensaba que podía dejarlo cuando quisiera, pero cuando intenté parar, la irritabilidad y la necesidad constante de tomarlo me hicieron darme cuenta de que no era tan simple. El médico me habló de adolescentes que incluso duermen con el vapeador bajo la almohada. Yo no llegué a tanto, pero sí lo usaba al despertar y varias veces al día sin darme cuenta.

Desde entonces he reducido su uso y estoy buscando ayuda para dejarlo por completo. Me sigue impactando que algo que vendían como ‘más sano’ pueda estar causando tanto daño y que realmente sepamos tan poco de lo que puede pasar a largo plazo. Si hubiera tenido esta información antes, seguramente habría tomado otra decisión."