"Aprendí a quererme": una historia real sobre bulimia

"La bulimia comenzó cuando tenía 15 años. Todo empezó con una dieta, algo 'inocente', pero pronto se convirtió en una obsesión con mi cuerpo y el control. Me atracaba por las noches, a escondidas, y luego me sentía tan culpable que corría al baño a vomitar. A veces lloraba mientras lo hacía, pero no podía parar.

Durante mucho tiempo lo oculté. En la escuela creían que solo era una chica tímida con problemas de autoestima, pero por dentro estaba luchando. Tenía ataques de ansiedad, me sentía sola y no podía contarle a nadie por miedo al juicio. Perdí peso, pero también energía, alegría, y casi pierdo relaciones importantes.

Finalmente, después de un desmayo en casa, mi mamá se dio cuenta de que algo no estaba bien. Buscamos ayuda profesional y fue el inicio de un proceso largo y difícil, pero liberador. La terapia me enseñó a identificar mis emociones, a tratarme con más compasión y a reconstruir la relación con la comida... y conmigo misma.

Aún tengo días difíciles, pero ya no me siento sola ni atrapada. Hablarlo fue el primer paso para sanar."