https://www.high-endrolex.com/17 Umbral
Te hablamos de las adicciones
  • ¿Es real la adicción al café y al té?

05 de noviembre del 2019

Anónimo

Es imposible negar que la mayoría de las personas están acostumbradas al consumo de cafeína como una poderosa herramienta para arrancar el día cargado de energía. Por lo general, la obtienen directamente del café o del té.

NOTICIA: Estado de ánimo modifica el sabor de los alimentos

Este tipo de rutina matutina, a pesar de estar normalizado en todo el mundo, podría parecer como una adicción. ¿Podemos ser adictos al café, té u otras bebidas con cafeína?

La droga más aceptada en el planeta

En el 2015 Nestlé México calculó que, en promedio, cada mexicano consume alrededor de 215 tazas de café al año, y proyectaron que para el 2025 habrá un incremento del 39% en el consumo, por lo que se cada persona consumirá 300 tazas anuales.

Aunque no se puede hablar precisamente de una adicción, la cafeína es definitivamente una droga psicoactiva. Según la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, la cafeína es una sustancia amarga que se encuentra en el café, el té, bebidas gaseosas, chocolate, nueces de cola y ciertas medicinas. Tiene muchos efectos en el metabolismo del cuerpo, incluyendo la estimulación del sistema nervioso central. Algunas personas son más sensibles a los efectos de la cafeína que otras, pero para la mayoría de las personas, la cantidad de cafeína, entre dos y cuatro tazas de café diarias, no es dañina.

Según la web dedicada a difundir artículos de ciencia, scieceabc.com, tras ingerirla a través de cualquier producto que la incluya, la cafeína entra en el estómago y se absorbe en el torrente sanguíneo. La cafeína es una molécula interesante porque es soluble en agua y grasa por lo que puede llegar a nuestro cerebro mientras que también puede viajar a través de nuestras venas, sangre y membranas celulares. Aquí es donde comienza la naturaleza adictiva de la cafeína.

Fuente:https://www.eleconomista.com.mx/arteseideas/Es-real-la-adiccion-al-cafe-y-al-te-20170131-0155.html